Aún no puedo concebir la palabra AmOr, o el sentimiento que se enmarca
en ella, lejos de mi mano siguiendo la tuya, incluso alejados de la rutina, de
la compañía, del cine, de la música o de la poesía.
Creo que la palabra unida al sentimiento se encuentran ligadas a las
sensaciones que ofrece la vida misma y a los cuerpos que la forman cuando son
uno solo. No puedo comprender como todos esos recuerdos y experiencias, ahora
son licuados y pesados, para determinar que ya no existen.
Puedo creer sin embargo, en la compañía, el diálogo de construcción
común, los amigos; incluso también, el no estar de acuerdo con algunas cosas,
el silencio, los temperamentos dispares, pero ellos construyen también
fortalecen una unión.
En estos momentos, en la que creo que es una convulsión el mundo, puedo
pensar que a veces no valoramos lo que podemos construir con otra persona, y
por supuesto que no hablo, de una casa y ladrillos o el carro que muchos
sueñan, cosas que al final se reducen a lo material. Hablo de la comprensión,
de la compañía, del apoyo, incluso de lo cómplices que pueden llegar a ser.
En esencia hablo de la posibilidad de construir un sentimiento, de
valorarlo, de aceptar que está en crecimiento y que definitivamente lo
alimentan en todo lo que se sucede alrededor de dos personas. Y definitivamente
no creo que desaparezca.
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